Como cada día, iniciamos nuestra jornada con un momento orante. Hoy inspiró nuestra oración el llamado y envío de Jesús a sus discípulos. El estribillo de un canto francés “la Buena Noticia es Él, la Buena Noticia somos nosotros; la Buena Noticia son ustedes”, tocó nuestros corazones.

Recordamos disposiciones para un buen discernimiento, hecho desde las entrañas de compasión, desde una libertad corresponsable, al estilo de Jesús. Dicho en palabras del Padre Mauricio recogidas en nuestras Constituciones: “… en la sencillez evangélica, que es una búsqueda sincera y constante de la voluntad del Padre en disponibilidad filial” (n 12)

Con este ánimo, trabajamos a lo largo del día dos campos de nuestra misión de compasión: el educativo y el socio-sanitario. En cada caso, complementando los datos del Informe del Consejo General con otros más concretos aportados por hermanas que trabajan en esos campos, y enriquecidos por el intercambio en asamblea capitular, vislumbrando los DESAFÍOS más significativos y una PROSPECTIVA de aquí a 5 años.

Al final de este día intenso, damos gracias por la honda escucha mutua, por la esforzada búsqueda común, porque una vez más constatamos la estrecha colaboración entre laicos/as y hermanas, sin los cuales ninguna de estas misiones estaría siendo posible!

¿Tienes algo que decir sobre la celebración de nuestro XXII Capítulo General? Agradecemos tus testimonios, comentarios, sugerencias,...